Divorcio: nadie quiere pasar por él, pero si llega hay que saber afrontarlo

Cuando una pareja no puede seguir unida, por las razones que sean, a veces hay que buscar salidas extremas, como puede ser el divorcio. Es una situación por la que nadie quiere pasar, pero que lamentablemente se puede presentar y que al suceder, hay que saber afrontar responsable y seriamente con apoyo legal profesional, esa es la mejor salida.

Cuando dos personas se casan formalmente, lo menos que piensan es en separarse después, pero lamentablemente es una situación que sucede muy comúnmente en aproximadamente casi un 50% de los matrimonios. Cuando se tiene que llegar a esta lamentable situación, lo más recomendable es buscar el apoyo de un buen abogado de divorcio que ayude a encontrar la mejor salida, que favorezca a ambas partes.

Lo mejor es buscar el apoyo de una buena agencia de especialistas, como la firma ABOGA2, que tiene los mejores profesionales en el área, con amplia trayectoria y altamente reconocidos por su efectiva actuación en los distintos casos donde participan.

Los divorcios no son agradables, por lo general están cargados de tristeza, impotencia, rabia y una mezcla de diversas emociones que pueden afectar al buen entendimiento de los excónyuges. Por eso, se deben realizar con mucho tacto y cuidado, para tratar de que las partes lleguen a un sano acuerdo.

Al abogado especialista en divorcios no solo le toca tratar los asuntos legales que envuelven a todo divorcio, sino también debe saber actuar con sutileza en cada caso para evitar herir susceptibilidades. Es un trabajo delicado que debe ser atendido por expertos en la materia que tengan amplia experiencia en el área.

¿Qué hace un abogado de divorcios?

Un profesional del Derecho que se dedique a atender casos de divorcios siempre tendrá por delante un trabajo arduo y difícil, por cuanto no solo deberá afrontar lo que legalmente se tiene que hacer, sino que también a veces le tocará lidiar con personalidades que pueden resultar conflictivas y que pueden hacer más difícil la búsqueda de soluciones.

Hay, básicamente, tres maneras distintas para formalizar un divorcio y en las que la participación del abogado siempre es esencial:

Divorcio express: cuando no hay hijos menores de edad y existe el mutuo consentimiento de las partes para divorciarse, se recurre a esta opción, que es la más rápida y fácil de todas, además de ser casi inmediata.

Consiste en la solicitud ante un notario o tribunal de la formalización del divorcio con un documento firmado por los excónyuges, en el que se determinan las condiciones del divorcio. En este caso, el abogado sirve a las dos partes y ayuda a gestionar todos los trámites.

Divorcio de mutuo acuerdo: es un divorcio también rápido que se realiza en una notaría pública o en una sede judicial, solo que cuando se tienen hijos menores los procedimientos se extienden un poco más, por los trámites que se deben realizar en el Ministerio Fiscal para determinar los actos legales relacionados con la guarda, custodia y manutención de ellos.

En este tipo de divorcio, un mismo abogado puede asesorar a ambas partes en la redacción del correspondiente documento y en el finiquito de los asuntos económicos de la pareja.

Divorcio contencioso: cuando ambas partes no llegan a ningún acuerdo y no pueden conciliar una salida amistosa, se debe entonces recurrir a este divorcio, que necesariamente se debe llevar a cabo en los tribunales para que un juez pueda dirimir la solución y establecer las condiciones del divorcio.

En este divorcio, cada parte debe tener un abogado que la represente y gestione todos los trámites legales necesarios para encontrar las soluciones más favorables y justas para su defendido.

Suelen ser procesos largos, en los que cada excónyuge debe presentar sus alegatos y demandas, para que el juez las evalúe y determine cómo debe quedar cada parte, incluyendo la custodia de hijos menores y las consecuencias económicas derivadas de la separación legal.

Sea cual sea el caso, los abogados de divorcios son sumamente importantes para ayudar a definir las soluciones más adecuadas para las partes involucradas. Siempre debe haber la asesoría pertinente y oportuna de un letrado especialista, y para esto, los mejores están en ABOGA2.